Me ha llamado la atención el estudio realizado recientemente en la Universidad de Valencia que arroja resultados sobre los trastornos mentales más frecuentes que se producen durante la infancia y la adolescencia en los niños y jóvenes españoles. ¿Cuándo una conducta o algunos comportamientos del niño son normales y cuándo un trastorno?
Normalmente, cuando escuchamos la palabra trastorno, nos asustamos.Culturalmente se asocia a locura, a algo que tiene difícil solución..., y si encima hablamos de trastornos infantiles, parece que los niños que los puedan tener cuentan con una etiqueta de por vida, o incluso una condena a no poder hacer una vida normal. ¿Qué hay de cierto en todo esto?
Antes de saber qué implicaciones tiene un trastorno en la infancia y cómo identificarlo, es importante que conozcamos cuáles son los trastornos mentales infantiles más frecuentes en función de la edad y el género. Con este título, la Universidad de Valencia ha publicado recientemente este estudio realizado por un equipo de investigadores (Navarro-Pardo E., Meléndez J.C., Sales A., y Sancerni Mª.D) donde han analizado a 588 niños españoles entre 1 y 18 años con diferentes dificultades tratadas por profesionales entre 2005 y 2009.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2001), la prevalencia de trastornos psicológicos en la infancia oscila entre el 10 y el 20%. Por este y otros motivos, se realizó el estudio; el cual concluye que:
- Los niños entre 0 y 5 años tienen mayor incidencia en trastornos de conducta, comunicación, control de impulsos y trastornos generalizados del desarrollo.
- Entre los 6 y 11 años también aparecen con más frecuencia los trastornos de conducta, seguidos del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH); rango de edad en la que se suelen realizar la mayoría de los diagnósticos.
- Los trastornos de conducta, junto con los de ansiedad son más comunes entre los 12 y 18 años; "ya sea por la mayor exigencia o nivel académico, los diversos cambios físicos, psicológicos y hormonalesde la pubertad o por la creciente interacción, relación de intimidad y compromiso entre iguales".
- Hay una mayor incidencia en los chicos de los trastornos de la conducta, y de ansiedad en las chicas a cualquier edad.
Estos datos nos dan mucho que pensar. Por un lado, que los trastornos de conducta son uno de los más frecuentes de la infancia y adolescencia; estando presente en todas sus etapas. Por otro lado, que es muy importante estar atentos al comportamiento y desarrollo del niño desde los primeros meses de vida, aunque nunca obsesionados.
Respondiendo a la pregunta del inicio del post "¿Cuándo una conducta o algunos comportamientos del niño son normales y cuándo un trastorno?"; tenemos que tener en cuenta que cuando una conducta o aspecto de su desarrollo está afectando a la vida diaria del niño y tiene implicaciones negativas en sus diferentes ambientes (afecta al cole, a la relación con otros niños, con su familia...), podemos hablar de una dificultad importante que podría llegar a ser un trastorno.
¿Qué podemos hacer en estos casos?
Acudir a un profesional de la materia que atienda al niño y a la familia; sobre todo en los casos en los que comienza a afectar la vida diaria del niño. Y por supuesto, realizar pautas en casa y en el resto de ambientes que fortalezcan la intervención que realice el profesional.
Y recordad que a través del juego, la atención, la comprensión, el afecto y las pautas guiadas, las dificultades de los niños pueden quedarse en retos que superar, pudiendo tener una vida similar a la del resto de niños de su edad.
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